Procedente de Alfaro, en donde inició su labor sacerdotal en 2002 y en donde ha sido párroco de San Miguel y El Burgo los últimos ocho años, Javier Martín, natural de Baracaldo, de 42 años, afronta con ilusión y ganas esta nueva etapa en Arnedo, esperando encontrar el apoyo de los arnedanos.
En Radio Arnedo ha explicado que “aprendí a ser sacerdote en Alfaro y ahora tengo que aprender a serlo en Arnedo. Vengo con humildad a ver y a que me enseñen los arnedanos. No tengo varita mágica. Tendremos años intensos, de probar cosas, y entre todos iremos haciendo. Hay mucho hecho, pero también mucho que aprender”.
Martín, que se ha confesado “triste por haber salido de Alfaro después de 16 años, porque todo cuesta”, pero a la vez “contento por esta nueva etapa”, se ha mostrado también agradablemente sorprendido porque ya ha comprobado que “hay mucha gente trabajando, mucho voluntario colaborando en Arnedo con la parroquia”.
Junto a los sacerdotes José Luis Hernández y Miguel Ángel Miranda, con los que considera “un lujo” poder trabajar, el nuevo párroco realizará su labor sabiendo que a la Iglesia en general y las parroquias en particular les esperan cambios en los próximos tiempos a los que habrá que saber adaptarse.
Según ha dicho, su manera de ser está “alejada de imponer cosas” y aunque reconoce que “alguien tiene que tomar decisiones” y a veces es parte de su tarea coordinar, siempre lo hace “después de haber visto cómo son las cosas”.
Así, ha explicado que “sabía lo que funcionaba más o menos en Alfaro. Ahora tengo que saber cómo se funciona en Arnedo, pero somos un equipo de tres sacerdotes”.
Martín considera también que “hay que preparar a las parroquias para cuando haya más falta de sacerdotes, porque ahora más jóvenes que yo sólo hay cinco o seis, tras la reciente ordenación del arnedano Alfonso Sáenz. Esa es la realidad de la iglesia riojana. Tendremos que ir adaptando las parroquias a que haya cada vez menos sacerdotes, dando protagonismo a los laicos, coordinando entre pueblos y quizá no sea descabellado tener que atender a pueblos de alrededor de Arnedo, algo que hasta ahora no se estaba haciendo”.