En Radio Arnedo, Eduardo Jiménez ha explicado que lograr el 6º Dan de Jiu-Jitsu supone “un reconocimiento a muchos años de trabajo a nivel deportivo y de docencia” ya que “cada Dan (o grado) es más difícil de conseguir”.
En este caso, pasar del 5º al 6º requiere de siete años de permanencia, la elaboración y defensa de una tesina, que él centró en “La evolución del jiu-jitsu japonés hacia la defensa personal actual”, y una parte práctica ante un tribunal.
Según ha dicho, “muchos meses de trabajo y entrenamiento” que han tenido su recompensa y que, en su caso, suponen una motivación para intentar mejorar día a día como docente para sus alumnos de judo y otras artes marciales.
Jiménez, que es también 6º Dan de Judo y 6º Dan de Defensa Personal, opina que “si te dedicas a enseñar tienes que seguir aprendiendo. Si somos profesionales tenemos que seguir aprendiendo para ser mejores enseñando” y, de hecho, dedica los veranos a cursos de reciclaje y especialización.
En cuanto a la medalla de plata de la Unidad de Gestión de las Fuerzas Armadas (UGFAS) que recibió el pasado 27 de octubre en la Academia de Infantería de Toledo ha explicado que reconoce la colaboración que presta desde hace años en la formación del personal militar en materias de judo y defensa personal y que le llenó de satisfacción puesto que ya en su día le habían concedido la medalla de bronce.
Jiménez, que desde hace más de 25 años imparte clases de judo, jiu-jitsu y defensa personal en Calahorra y en Rincón de Soto, ha comenzado a impartir también este curso clases de judo como actividad extraescolar en el colegio público ‘Antonio Delgado Calvete’ de Arnedo, abiertas también a alumnos de otros centros.
Y ha destacado que este deporte es, según la UNESCO, el más recomendable para niños a partir de 5 años y adolescentes porque no sólo aporta beneficios físicos sino también valores. El principal, el del respeto al compañero, “sin el cual no puedes prosperar ni seguir aprendiendo y eso es algo recíproco”.