El Ayuntamiento calagurritano detalla que las obras tienen un presupuesto inicial de licitación de 1.088.615,77 euros, a lo que hay que sumar contratos para la dirección facultativa de las obras, control de calidad y coordinación de seguridad y salud. Todo ello hace un total de 1.154.468,96 euros, con los impuestos incluidos.
El plazo de ejecución de esta actuación será de nueve meses, a contar desde el día siguiente a la firma del acta de comprobación del replanteo que supone el inicio de las obras.
Todo ello sucede cuando el Ayuntamiento de Calahorra ha concluido ya con la expropiación de los terrenos necesarios para dicha actuación.
En cualquier caso, actualmente el polígono “El Recuenco” ya dispone de accesos desde el Polígono Tejerías, que fueron recibidos en diciembre de 2020.
Además, el consistorio recuerda que recientemente se han acometido obras de reparación de instalaciones de distribución eléctrica y alumbrado público, así como obras de reparación y acondicionamiento de los servicios de los que dispone el polígono industrial. Ambas actuaciones suman una inversión de 1,88 millones de euros absolutamente necesarios para la puesta en marcha definitiva del polígono industrial.
Por otro lado, la Junta de Gobierno Local aprobó este martes 7 de junio la prórroga hasta 2027 del convenio entre SEPES y el Ayuntamiento de Calahorra para la ejecución de las fases del nudo de acceso a la carretera N-232, así como la senda financiera prevista.
Así, la finalización de los accesos desde Tejerías; la conclusión del proceso de expropiaciones; la acometida de las obras de reparación eléctrica, alumbrado y servicios del polígono y, ahora, de los accesos desde la N-232 son muestra de la coordinación y el trabajo llevado a cabo tanto por SEPES como por el Ayuntamiento de Calahorra.
A ello hay que sumar la próxima instalación en Calahorra de la Ciudad del Envase y el Embalaje, para la que existen partidas presupuestarias tanto del Gobierno de España como del Gobierno de La Rioja de más de 40 millones de euros, lo que sin duda va a suponer un antes y un después para la economía calagurritana y para el desarrollo de la ciudad.
Finalmente, y tras una década de parálisis, la posibilidad de obtener suelo en este polígono industrial a precios de mercado supone también el desbloqueo definitivo de cientos de miles de metros cuadrados de suelo industrial por los que muchas empresas tanto de La Rioja como de fuera de la comunidad ya se han interesado en instalarse en “El Recuenco”.