De hecho, a lo largo de ese año se apadrinaron diez árboles, en 2018 fueron diecinueve más y, en lo que llevamos de este 2019, otras diecinueve personas, la mayoría de ellas niños, se han sumado a esta propuesta que pretende inculcar el respeto por los árboles y concienciar de los beneficios que aportan en las ciudades.
El concejal de Medio Ambiente, José Luis Rubio, y el jefe de la brigada municipal de jardinería, Carmelo Pérez-Aradros, participaron en este acto de entrega de certificados de apadrinamiento, en el que el alcalde, Javier García, agradeció el trabajo que realizan los integrantes del área de parques y jardines, no solo en el mantenimiento de estos espacios, sino también en el ámbito de la sensibilización y la innovación.
García, que felicitó además al concejal Rubio por haber “inculcado alma” en el área de Urbanismo, de la que también es responsable, destacó la importancia del apadrinamiento de árboles, que sigue abierto a todas las personas interesadas, porque “potencia la participación activa de las familias y de los ciudadanos en el urbanismo ligado a las especies vegetativas”.
En este sentido, destacó la gran aceptación que ha tenido esta iniciativa pedagógica con la que ya se han apadrinado medio centenar de árboles
Por su parte, Rubio ha señalado que para apadrinar un árbol tan solo hay que solicitarlo en el ayuntamiento y abonar un precio de 20 euros con los que se grabará la placa que la brigada de jardines colocará junto al ejemplar seleccionado, con sus nombres común y científico correspondientes y el de la persona que lo apadrina, además de su fecha de nacimiento cuando se trata de un niño, como Luis Ezquerro Pérez-Aradros, que a sus 4 años tiene un abedul en el parque ‘Gloria Fuertes’, muy cerca del árbol que lleva el nombre de sus hermanas gemelas.
En este mismo espacio varias familias arnedanas ya han apadrinado doce árboles, entre ellos los dos cedros del Atlas que Ignacio Martínez ha dedicado a sus nietos.