El río Cidacos a su paso por Calahorra presenta un entorno muy deteriorado, en especial entre la autopista AP-68 hasta la desembocadura en el Ebro. Constituye un entorno muy antropizado, carente de especies arbustivas y arbóreas propias de ambientes fluviales donde la ausencia de bosque de ribera es casi total.
Pese a la intensa alteración de los hábitats, aún se pueden apreciar algunos entornos en donde los ecosistemas se encuentran en buen estado de conservación, y pueden servir como ejemplo para la restauración de zonas degradadas cercanas.
A lo largo del tramo final del río Cidacos existen una serie de parcelas de titularidad municipal; así como las parcelas que comprenden el propio cauce del río sobre las que se pretende actuar mediante su reforestación con especies autóctonas de bosque de ribera.
Además, en Calahorra se produce un uso intensivo de la Vía Verde para pasear o hacer deporte, siendo una infraestructura muy utilizada y disfrutada por la ciudadanía. En contraposición al uso intensivo de la Vía Verde, el GR-99 (Camino natural del Ebro) es un gran desconocido en nuestra ciudad, en parte es debido a que el Ebro dista aproximadamente 4 kilómetros del casco urbano de Calahorra.
Calahorra tiene en el Ebro un espacio natural con un importante valor ecológico que forma parte de la Red Natura 2000 (ES2300006) Sotos y Riberas del Ebro y que también forma parte del Monte de Utilidad Pública nº 152 “Los Agudos y Sotos del Ebro” del Catálogo de Montes de Utilidad Pública de La Rioja. Además de disponer de un importante valor paisajístico, en ocasiones desconocido por nuestros propios conciudadanos.
Por tanto, el objetivo del consistorio es prolongar el trazado de la vía verde de tal manera que la misma discurra hasta la desembocadura del Cidacos en el Ebro, en el término conocido como “bocarrio”, de tal manera que sirva de nexo entre Calahorra y el Ebro, entre los habitantes y este hermoso espacio natural fomentando a su vez el conocimiento, uso y disfrute del GR-99.
Se trata de un proyecto ambicioso que pretende recuperar un ámbito fluvial muy degradado ampliando los sotos del río Cidacos a la vez que se facilita su uso como lugar de disfrute, de esparcimiento y deportivo, abriendo una puerta atractiva al GR-99, al río Ebro y sus sotos en consonancia con la intención del Ayuntamiento de Calahorra de favorecer la naturalización de varias parcelas municipales situadas en el entorno de los sotos del Ebro.
En definitiva, un proyecto que pretende mejorar el medio ambiente en el municipio de Calahorra, restaurar ambientalmente el cauce del río Cidacos en su tramo final haciendo que Calahorra y su población se acerque más al Ebro y descubra el valor ecológico y paisajístico de los sotos del Cidacos y del Ebro, disfrutando de ellos en todo su esplendor.