COMITE FHC DENUNCIA RADIODIAGNOSTICO

COMITÉ FHC DENUNCIA ESTADO RADIODIAGNÓSTICO  El Comité de Empresa de la Fundación Hospital de Calahorra ha denunciado que los equipos de Radiodiagnóstico convencional de este centro, a pesar de haber sido declarados “no aptos”, estuvieron funcionando durante tres meses de 2014, concretamente desde la fecha de control de abril hasta el 22 de julio, día de su ajuste. A través  de una nota de prensa, el Comité incide en que desde hace tiempo el funcionamiento de equipos e instalaciones del Servicio de Radiología del hospital calagurritano “no es el adecuado” y que “sus manifiestas carencias y frecuentes desajustes menoscaban la calidad de la asistencia prestada al paciente, dificultan la práctica diagnóstica e incrementan innecesariamente los riesgos para la integridad de los propios especialistas que realizan las pruebas.En este sentido, asegura que los profesionales vienen exponiendo, repetidamente, estos problemas a la direción del centro. De hecho se esperaba una solución en diciembre pasado que quedó en suspenso tras la dimisión del anterior Gerente del hospital.El Comité detalla que en el servicio de Radiología de la FHC existen dos salas de radiología convencional, cada una dotada con su propio equipamiento, es decir lo que conocemos como Rayos X,  y que, según los Informes de Control de Calidad del Servicio de Radiofísica y Protección Radiológica del Sistema Público de Salud de La Rioja, fechados en junio del año pasado, el resultado de los test -realizados el mes de abril- fue de “No Apto” para ambos equipos, tras realizar las pruebas correspondientes sobre los parámetros habituales (como son homogeneidad entre cámaras, ajuste del selector de densidad y repetibilidad, compensación para diferentes tensiones y compensación para diferentes espesores de paciente).En concreto, uno de los equipos presentaba una desviación de tensión muy superior a la permitida, mientras que el otro superaba también la tolerancia admisible de tensión.No obstante, el Comité de empresa aclara que tal ”ineptitud” técnica afecta a la idoneidad de los equipos desde su capacidad como herramienta diagnóstica, lo que no es poco, aunque no conlleva un riesgo añadido para la salud de los pacientes.Así las cosas, los trabajadores cuestionan que “no existe un plan de inversiones ni criterios serios que garanticen la calidad de la asistencia sanitaria mediante la renovación progresiva de las instalaciones y equipos a medida que se ven afectados por su inevitable obsolescencia”.Por todo ello, confían en que esta denuncia “sea útil” y sirva para que se adopten las medidas urgentes de re-capitalización del Hospital de La Rioja Baja, afrontando inmediatamente sus carencias, tanto de equipamiento como de plantilla, en ambos casos sobrevenidas a los largo de los últimos años y perfectamente conocidas y documentadas.