Del reconocimiento a este proyecto, que cuenta también con la participación de los Servicios Sociales municipales y el SOID, el Centro de Salud y el Centro Joven, hemos hablado esta viernes 31, en Radio Arnedo, con una de las participantes en el mismo, la orientadora del IES ‘Celso Díaz’, Julia Herrero, quien ha asegurado que están “muy contentos porque se ha generado un ambiente de trabajo y de colaboración muy adecuado, que se inició ya desde el curso pasado cuando vimos la necesidad de entrar en contacto en los distintos centros para mejorar la convivencia y prevenir y evitar en la medida de lo posible las situaciones de acoso”.
Y es que ha recalcado que “nos dimos cuenta de que muchas veces estas situaciones no solo se circunscribían al entorno escolar, sino que también podían darse problemas cuando iban a entrenar, en actividades extraescolares o en los comedores…con lo que decidimos unirnos todos los colegios e institutos de la ciudad para empezar a trabajar en mejorar la convivencia, y en ello estamos”.
Herrero ha recordado los pasos que se han dado hasta ahora en la puesta en marcha de este proyecto que se presentó públicamente el pasado 30 de enero, ante la preocupación común por un problema que, hoy en día, con la utilización de teléfonos móviles y redes sociales, trasciende el ámbito escolar.
En este punto, ha incidido en que, junto a los grupos que se han creado para ir trabajando distintas cuestiones, el objetivo es abrir la iniciativa a la sociedad en general “porque se trata de mejorar la armonía en la localidad y de que cada uno, desde nuestros entornos, podamos contribuir a ello”.
Así las cosas, el próximo curso tienen previsto difundir la campaña ‘Yo me uno’ en todos los espacios que frecuentan los adolescentes, incluso en establecimientos particulares, “para que todo el mundo pueda adherirse” a la misma, además de que cada mes se pondrán en marcha distintas actividades.
Con todo, la orientadora del IES ‘Celso Díaz’ ha reconocido que en la actualidad el mayor problema es el derivado del ciberacoso o ciberbulling por lo que, entre otras actuaciones, se está trabajando con un grupo de alumnos ‘ayudantes’ en redes sociales para que los más mayores de Bachillerato o de 4º de ESO hagan ver a los escolares más jóvenes “el necesario respeto que tiene que haber en la red”.
Con estas y otras actuaciones y, sobre todo, con la implicación de toda la sociedad, Herrero confía en que a medio o largo plazo se pueda mejorar la convivencia no solo en el ámbito escolar sino también en la localidad en general.
Entre tanto, considera que “los alumnos son conscientes de que hay determinados comportamientos que no son tolerables y que son ya mucho más dados a denunciar situaciones de trato inadecuado hacia otros compañeros, y a quejarse ellos mismos cuando lo sufren”, además de que “las familias saben qué cauces deben seguir cuando detectan o piensan que su hijo puede estar pasando por esta situación”.