Un premio que recuerda al periodista y corresponsal de guerra Julio Anguita Parrado, que murió el 7 de abril de 2003 a los 32 años cuando fue alcanzado por un misil lanzado en un ataque del ejército iraquí a un centro de comunicaciones al sur de Bagdad.
Ángeles Espinosa, que cuenta en su haber con otros premios como Ortega y Gasset de Periodismo en 2002 y 2003; el Víctor de la Serna de la Asociación de la Prensa de Madrid, o el premio del Club Internacional de Prensa, además de la encomienda de la Orden del Mérito Civil, se ha mostrado en Radio Arnedo muy agradecida por este nuevo reconocimiento que, según ha dicho, “es un premio muy especial porque hace un homenaje a un compañero que cubrió la guerra de Irak, que yo también cubrí, y, aunque no lo conocía personalmente, recuerdo aquel momento tan terrible”.
Espinosa, especializada en el mundo árabe e islámico, ha cubierto las guerras de Irán e Irak y otros conflictos en países como Líbano, Palestina y Yemen, ha entrevistado a la mayoría de los jefes de Estado de la región.
Sobre las coberturas de guerras y conflictos ha reconocido que siente miedo, pero que lo afronta concentrándose en su trabajo, del que ha dicho que está enamorada, porque desde siempre le atrajeron las relaciones internacionales y conocer otros países, culturas y formas de pensar. Y, aunque ha reconocido que desde hace unos años la labor de los corresponsales se ha complicado, ha destacado que los periodistas que peor lo pasan en estados autoritarios y sin libertades son los que se dedican a la información local.
En cuanto a la situación de la profesión periodística en general, Ángeles Espinosa ha mostrado su preocupación porque actualmente haya una total confusión entre información y opinión, sobre todo en redes sociales, y por las condiciones laborales de los periodistas, cada vez más deterioradas.
Y, a nivel personal, ha recalcado que tiene muchas ganas de volver a La Rioja y a su ciudad, Santo Domingo de la Calzada, pero ya pudiendo abrazar a sus familiares y amigos.