Un acto que coincide con los días de luto oficial en España decretados por el Gobierno central y que se ha querido plantear también desde el punto de vista de la integración social entre todas las nacionalidades y confesiones religiosas que conviven en Arnedo, porque la pandemia no entiende de orígenes, ideologías ni fronteras.
Al acto, en el que el alcalde, Javier García, pronunció un breve discurso, fueron invitados representantes de las nacionalidades mayoritarias en Arnedo, así como del colectivo gitano, el párroco, Javier Martín, y los integrantes de la Corporación municipal.
También acudieron representantes de Policía Local, Guardia Civil, Protección Civil, Bomberos, Cruz Roja, Cáritas, el Centro de Salud, la Fundación Francisca Bretón, el Centro de Participación Activa de Personas Mayores, el Consejo Infantil, AICCOR, la Residencia de Personas Mayores y el Colegio de Farmacéuticos.
Fue un acto de homenaje sencillo, acompañado por música, en el que se guardó un minuto de silencio y se hicieron tres llamadas a la oración. La primera del colectivo musulmán, la segunda con un toque de campanas desde la iglesia de Santa Eulalia, donde celebran sus ritos los ucranianos, georgianos y armenios, y la tercera con el toque del “Aragón bien va” desde la torre de la iglesia de San Cosme y San Damián, en representación de la religión católica.