ALVAREZ: GESTION INAR «OPACA Y NEFASTA»

ÁLVAREZ: GESTIÓN INAR ES ‘OPACA Y NEFASTA’ La gestión de la empresa municipal del Ayuntamiento de Arnedo, INAR, es “totalmente opaca y nefasta” porque, no sólo no se responde a las preguntas que sobre ella plantean los grupos de la oposición, sino que el equipo de gobierno ya ha confirmado (lo hacía el teniente de Alcalde Jesús Gil de Gómez en la comisión de Hacienda del pasado lunes 10) que, a fecha del pasado 30 de septiembre, sus pérdidas se elevaban a 176.000 euros.                                                                                     Lo han dicho este miércoles 12 de febrero los concejales no adscritos, Francisco y Santiago Álvarez, que temen, además, que una vez cerrado totalmente el ejercicio 2013 el importe de las pérdidas supere los 200.000 euros, a pesar de que en el pleno del pasado 28 de noviembre, el portavoz popular Manolo Soria afirmó que INAR se financiaba sola y el alcalde dijo que no existía ninguna pérdida.Los concejales Álvarez insisten en que debe ser precisamente el alcalde, Juan Antonio Abad, como presidente del Consejo de Administración, y no la gerencia de INAR, quien ofrezca toda la información que se le solicita. Lo contrario, según ha recalcado Francisco Álvarez, es burlarse del trabajo de los concejales de la oposición y, lo que es peor, de los ciudadanos “que tienen derecho a saber la gestión que se hace en una empresa cien por cien municipal, que gestiona dinero público, más aún cuando acumula pérdidas un año tras otro y no se da ninguna explicación”.Álvarez ha repasado las numerosas cuestiones no aclaradas en torno a INAR, como qué ampliaciones de capital se han hecho, por qué importe y para qué; a qué conceptos se van a aplicar los porcentajes que va a cobrar la nueva gerencia (la empresa NUR, antigua Adepri); cuál es la opinión de los técnicos municipales sobre el pliego de condiciones que se sacó para adjudicar esa gerencia o su informe sobre las mejoras que NUR incluyó en su oferta, entre ellas la contratación de un encargado para la zona deportiva.En este punto, ha indicado que es “rocambolesco” que “el ayuntamiento encomiende la gestión de la zona deportiva a INAR, pero después el encargado del personal no lo contrata ni el Ayuntamiento ni INAR, sino la empresa que gestiona INAR. Nos parece un poco raro y por eso pedíamos un informe del técnico municipal correspondiente sobre esta operación,  que entendemos puede quedar fuera de la legalidad de las Administraciones locales, pero no tenemos respuesta, así que más dudas y más opacidad”.También en materia de personal, los concejales Álvarez piden un informe técnico-legal sobre la contratación, por obra y servicio, de los cinco trabajadores que se encargan de la limpieza y mantenimiento de la zona deportiva (una tarea permanente, no de obra y servicio), cuando aún está pendiente de juicio la reclamación de los antiguos empleados de la empresa OSGA, que venía realizando esas tareas, porque entendían que debían ser subrogados por INAR.Aquí, Francisco Álvarez ha dicho que “entendemos que lo que está haciendo el Ayuntamiento es hacerse trampas al solitario. Usa una empresa cien por cien municipal para saltarse las limitaciones que la ley marca a las Administraciones locales, así que es actuar en fraude de ley. Se buscar un resquicio que deja la ley para saltárnosla”. No ser cómplices de pérdidas de dinero públicoDudas sobre la legalidad de ciertas cuestiones, otras pendientes de aclarar y, sobre todo, la certeza de importantes pérdidas de dinero público de las que Santiago Álvarez insiste en que no quiere ser cómplice. Argumento que utilizó para salir del Consejo de Administración de INAR y que sigue esgrimiendo cuando se le pregunta por la reiterada invitación del equipo de gobierno, incluso del alcalde por escrito (el pasado 10 de enero), a que vuelva a incorporarse a él.Según ha dicho, “quedarme en el Consejo seria tanto como ser cómplice de unas pérdidas que ya se ha demostrado que se iban a tener. No es algo sobrevenido, porque ya en el presupuesto de INAR para 2013 se contemplaban pérdidas de más de 200.000 euros y yo no voy a ser cómplice de que los responsables municipales dilapiden más de 30 millones de pesetas de todos los arnedanos y mucho menos en unos momentos en los que hay tantas necesidades que podrían ser atendidas con ese dinero. Me parece  denunciable que esto sea así”.            Santiago Álvarez ha insistido también en que, con la actual situación económica, no saldrá adelante el proyecto de rehabilitación energética de viviendas y regeneración urbana, con el que el equipo de gobierno justifica la continuidad de INAR.            Por ello, ha dicho, “si no va a haber actuaciones en ese proyecto, ni en la urbanización El Sol, ni ningún otro proyecto que pueda hablar de rentabilidad de esta empresa municipal, lo razonable es dejar una estructura mínima, si acaso un auxiliar a media jornada para atender consultas, y dejar sin actividad a INAR. Así lo aconsejan los tiempos. Seguir con actividad es seguir asumiendo pérdidas de antemano que salen de los bolsillos de todos los arnedanos, que salen directamente de nuestros impuestos. Mejor empleado estaría ese dinero en Cáritas o en Cruz Roja para ayudar a terminar el mes a muchas familias, y no dilapidad en INAR como ha pasado en 2013 y ocurrirá, seguramente, en 2014”.Santiago Álvarez ha respondido también al argumento del equipo de Gobierno de que, si los vecinos no dan su visto bueno al proyecto de rehabilitación energética, se perderán importantes subvenciones ya comprometidas. Un argumento que considera malévolo, porque no se trata de querer, si no de poder.En este punto ha señalado que “para entrar en una subvención debo disponer de un dinero que en muchos casos, en las barriadas de las que hablamos, no tienen. Dónde van a ir a pedirlo personas con más de 80 años y 500 o 600 euros de pensión, por más que se quiera, no se puede. Y tratar de responsabilizar a la gente de no aprovechar esta ocasión es hasta malévolo”.Además, Álvarez ha recordado que quien recibe una subvención debe tributar por ella. Algo que, al parecer, no se explica a los vecinos cuando se les plantea el proyecto. Por todo ello, ha concluido indicando que “la realidad es tozuda y por más que nos empeñemos no la vamos a cambiar si no hacemos otras cosas, otras políticas que nos saquen de una situación que es muy complicada para mucha gente”.