Según la información facilitada desde el CTCR, su aplicación más exitosa adquiere especial relevancia en el caso de las suelas de caucho NBR o SBR, dos especies de goma sintética muy utilizadas en la industria zapatera por sus excelentes propiedades en cuanto a resistencias se refiere, entre otras.
Destaca que con este método, mejorado gracias a la nanotecnología, se consiguen múltiples efectos positivos, ya que el grado de unión entre las dos partes es lo más alto posible pero, además, se evita el empleo de los habituales pegamentos halogenados altamente contaminantes, recurriendo a una producción más limpia, más respetuosa con el medio ambiente, menos tóxica e incluso acorde al REACH (Reglamento europeo de registro, evaluación, autorización y restricción de sustancias químicas).
Detalla que el tratamiento que ha dado luz verde a este avance consiste en la combinación de dos métodos. Por un lado, se ha apostado por la incorporación de plasma atmosférico frío, que es añadido como un recubrimiento sobre la superficie de la suela y/o el corte, abarcando gran variedad de materiales, sin provocar el deterioro por un calentamiento excesivo; y, por otro lado, se ha mejorado el adhesivo con la adición de nanocargas o nanopartículas, sin alterar la estructura química del mismo.
Así, al descartarse la halogenación se eliminan, a su vez, todos sus problemas derivados, pues no se producen subproductos químicos o reacciones indeseables, también es más seguro y duradero, y, por último, es más económico, porque los equipos de plasma, por ejemplo, son relativamente baratos y el coste de los gases del plasma es muy bajo.
Con todo, afirma que este proyecto aportará un valor añadido a los fabricantes de calzado, ya que podrán disponer de un novedoso proceso, además de todas las ventajas anteriormente citadas.


