El propio Jiménez ha explicado en Radio Arnedo que no podía consentir que esta asociación, que en 2021 cumplirá sus 40 años de existencia, desapareciera ante la falta de relevo que desde hace un año y medio venía reclamando la actual junta directiva en funciones.
Ha reconocido que ante la convocatoria, el pasado 16 de septiembre, de la asamblea general extraordinaria en la que, si no salía una nueva junta directiva, estaba previsto que se disolviera la asociación, “llevaba ya unos días con esta tristeza y esa mentalización de que era injusto que una obra, a mi juicio importante para Arnedo y los arnedanos, desapareciera, y más tratándose de una asociación cultural, amante de las tradiciones y llamada Amigos de Arnedo”.
Así las cosas, ha explicado que se planteó que “si no salía nadie, tendría que dar el paso al frente porque no me parece bien que desapareciera una obra en la que se han hecho tantísimas cosas por Arnedo”, entre las que ha recordado que se puso en marcha la banda de música y el grupo de danzas y que se recuperaron algunas tradiciones.
Con todo, Jiménez ha afirmado que “yo no he venido aquí como salvador, yo he venido con mucha humildad para sacar al enfermo de la UVI y que pueda continuar viviendo muchos años más, pero para eso necesito un equipo bien conformado, coherente, con gente joven para que haya posibilidades de futuro, y con unas ideas un tanto modernizadas para poner al día esta asociación, como ocurre con todas las asociaciones”.
Jiménez ha recalcado que su objetivo es tratar de conformar una nueva junta directiva, formada por personas de distintas edades, con un proyecto que sea capaz de entusiasmar a la gente y que Amigos de Arnedo, que actualmente cuenta con unos 530 socios, “vuelta a tener la fuerza que siempre ha tenido”.
Ha reconocido que “la sociedad está cambiando mucho y quizá hay otras prioridades y las personas dan valor a otras cosas que no son estas” pero, en cualquier caso, cree que “si hacemos una programación adecuada y unos cambios importantes, que no han de ser muchos porque no se puede abarcar demasiado, se puede tratar de entusiasmar a la gente”.
En este sentido, ha abogado por “mantener todo lo que funciona, tal vez eliminar lo que no tiene aceptación y hacer innovaciones en todas las vías, desde aspectos culturales, deportivos e informáticos, entre otros”.