El Ayuntamiento explica que ha mantenido varias reuniones con la Asociación de Vendedores del mercadillo de los jueves de Calahorra con el objetivo de posibilitar su funcionamiento adaptado a las circunstancias sanitarias.
En virtud de las mismas se ha adoptado el acuerdo de reanudar el mercadillo cambiando su ubicación y dividiendo los puestos en dos grupos. De esta manera el mercadillo de los jueves pasará a celebrarse temporalmente fuera de su lugar habitual al que regresará en cuanto la situación sanitaria se normalice. .
En cualquier caso, las medidas de higiene y seguridad en los puestos se mantendrán en las mismas condiciones que venían desarrollándose desde mayo.
Con esta decisión se pretende permitir recuperar el mercado pero tratando de evitar la importante aglomeración de personas que el jueves supone en el centro de la ciudad puesto que es un acontecimiento social que va más allá del mero mercado de venta ambulante al aire libre.
A mediados de septiembre, ante la situación epidemiológica se decidió, entre otras medidas, suspender la celebración del mercadillo de los jueves, que tiene un importante arraigo en Calahorra y en toda la comarca, haciendo las mañanas de los jueves uno de los días más concurridos en el casco urbano puesto que, más allá del propio mercado, se trata de un acontecimiento social que pone en la calle a cientos de calagurritanos y calagurritanas y que atrae hasta nuestro casco histórico a visitantes de todos los municipios del entorno.
Esta circunstancia fue la que motivó su suspensión, de manera que se evitara la movilidad que genera y el importante flujo de personas que se acumulan en el centro de Calahorra de personas que aprovechan esa mañana para mantener reuniones sociales, realizar gestiones administrativas, gestiones bancarias y disfrutar del innegable ambiente de bullicio y animación que genera en Calahorra el mercadillo.
La venta ambulante al aire libre, con la ampliación de espacio que se realizó en su reapertura el 14 de mayo y las medidas de seguridad aplicadas hacen que la actividad en sí misma sea segura. Por lo que su suspensión se vio motivada por las actividad que se genera a su alrededor, no por el propio mercado en sí mismo.
Esta cuestión ha sido entendida y respetada por la asociación de vendedores que, al igual que el Ayuntamiento, compartía que la salud era lo primero. Dos meses después del cierre, la decisión que fue tomada con carácter temporal ha supuesto un importante perjuicio para los vendedores que se pretende evitar con los cambios decididos.
El Ayuntamiento de Calahorra ha querido hacer un “agradecimiento expreso a la asociación de vendedores del mercadillo de Calahorra por su comprensión con la difícil situación sanitaria que atravesamos y su buena disposición al diálogo”.
El consistorio lamenta “profundamente que se hayan tenido que ver perjudicados por una situación que no es su responsabilidad directa” manifiesta una vez más “su apoyo y disposición a seguir dialogando para ir adaptando el mercadillo a las circunstancias”.
Fotografía: larioja.com